Mensaje de la Reina del Rosario y de la Paz
¡La paz a tu corazón!
Hijo mío, Dios os habla por medio de mí, mas muchos no me
quieren oír. Muchos son incrédulos, de corazón endurecido y cerrado. ¿Cuándo aprenderán
a oír el llamado de Dios a la conversión? Muchos no rezan más y no quieren
saber de las obras del cielo, porque dejaron a Dios de lado. Están más preocupados
en salvar el cuerpo que el alma. ¿Qué adelantará todo eso, si al final de la vida
de cada uno pueden merecer el fuego del infierno?
¡Luchad por el Paraíso y no por el mundo y sus obras
infructíferas! El cielo es vuestra verdadera morada. Yo vine del cielo para
conduciros hasta él, donde está mi Hijo Jesús. Rezad, rezad, rezad mucho para
tener la fuerza y la gracia de seguir sus enseñanzas y sus pasos. A todos os
bendigo: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.