La primera aparición de la Virgen María, a Maria do Carmo, tuvo lugar el día 2 de mayo de 1994. A Edson Glauber, su hijo, el día 31 de mayo de 1994, mientras él y su madre, rezaban el rosario en casa. Desde entonces la Virgen, San José y Jesús continúan transmitiendo mensajes y oraciones para difundir la devoción en todo el mundo a sus tres Sagrados Corazones.

Los mensajes originales están expuestos en portugués en:

As aparições da Virgem Maria no Amazonas

domingo, 25 de marzo de 2018


Las apariciones de los tres Sagrados Corazones unidos de Jesús, María y José en Itapiranga (Amazonas, Brasil) vienen a revelarnos el gran amor de Dios por las familias, que las desea santas, fundamentadas en los cimientos del amor y la obediencia a sus Leyes Divinas, que santifica y libera a los hombres de la esclavitud del pecado y de la ceguera del alma, que llevan a muchos a la muerte eterna. Por medio de los mensajes y las manifestaciones de la Santísima Virgen, Reina del Rosario y de la Paz, en Itapiranga, Dios preparó un rio de gracias a todas las familias del mundo entero e hizo evidente la persona de San José en toda la Iglesia.
La persona de san José, muy poco conocida y de la que poco se habla actualmente, es el anuncio de tiempos nuevos y grandiosos que llegan a nuestros días, como una señal de protección y de amor misericordioso de Dios a su Iglesia y a muchas familias del mundo entero, que pasan por momentos críticos y difíciles, donde los crímenes contra la vida y contra los principios cristianos están amenazándolas y siendo colocados en práctica, para la destrucción y ruina de muchos lugares. Para comprender la importancia de San José en nuestros días debemos conocer mejor su persona, por medio de las Sagradas Escrituras y de lo que Dios nos revela respecto a su persona: hombre justo y humilde, hombre de silencio, sabio y prudente que tuvo en su hogar los dos tesoros preciosos de santidad y de amor: Jesús y María. Podemos encontrar en la Palabras Divinas luz y gracia que nos confirman los grandes hechos y maravillas que el Altísimo realizó en la visa de este Santo Patriarca, escogido por Dios Padre para ser el Padre Adoptivo de Jesús Cristo, e iluminado por el Espíritu Santo, para volverse el verdadero Esposo Castísimo de la Virgen Inmaculada.
El Ángel anuncia a José el misterio de Dios, en María, y que él era el encargado por Dios, para cumplir una gran misión, al lado de Ella y de su Hijo Jesús. Hoy, por medio de su Corazón Castísimo, San José viene a nosotros para anunciar el tiempo de gracia de Dios para la humanidad, revelándonos las promesas de su Corazón Castísimo que nos conducen rápidamente a los Corazones de Jesús y María, ayudándonos a estar unidos a Dios profundamente en el amor y en la imitación de sus virtudes.
Jesús tiene prisa en que la persona de San José sea puesta en evidencia para la santificación de las familias, particularmente de los hombres, de los esposos que necesitan de la luz, de la fuerza y de la gracia divina para vivir santamente sus compromisos cristianos. Y que al lado de su Sagrado Corazón y del Corazón Inmaculado de María sea honrado, amado y venerado el Corazón de su Padre castísimo José. Este es uno de las principales peticiones reveladas por Dios en el Amazonas: que toda la Iglesia reconozca y honre el Corazón de San José y que ella como Maestra y Madre revele y difunda esa gracia al mundo entero para la salvación de las familias.
Acojamos, por tanto, este rio de gracias que viene del Amazonas, por medio de las manifestaciones de amor de los tres Sagrados Corazones unidos de Jesús, María y José, con la certeza de que la paz y el amor de Dios reinarán para siempre en nuestros hogares y en nuestras vidas “porque para Dios nada es imposible”… Porque “su amor se extiende de generación en generación sobre aquellos que lo temen”.

Edson Glauber de Souza Coutinho




24 de marzo de 2018 – Manaus, Amazonas
Mensaje de María
¡La paz a tu corazón y a tu familia!
Hijo mío, yo tu Madre, estoy aquí para darte fuerza y coraje. En mi Inmaculado Corazón podrás tomar las gracias necesarias para continuar, sin jamás desanimarte, tu misión a la cual el Señor te llamó y preparó.
Dios tiene prisa, muchas almas se encuentran ciegas espiritualmente y siguen rumbo al abismo del infierno, por eso, Dios pide de ti y de todos lo que creen en esta obra, que llevéis con amor la cruz, sabiendo sacrificarse y ofrecerse por la conversión y salvación del mundo pecador e ingrato.
En cuanto tú y tus hermanos sepáis cargar la cruz con amor y paciencia muchas almas serán liberadas de las garras de satanás y serán curadas por el amor del Señor.
Los pecados son muchos, pero mucho mayor es el amor y la misericordia de Dios por la humanidad que todavía no sabe serle grata.
Reza, reza mucho hijo mío, y haz que mis hijos recen y juntos suplicad las gracias y las bendiciones de los cielos para los pecadores, para que se arrepientan y se conviertan.
Muchos son aquellos que se alejan del camino del Señor y ya no creen más, mas no te preocupes, en breve llegarán otros muchos que creerán y harán lo que el Señor desea y tu verás las grades cosas que Dios continuará realizando, por medio de mis apariciones y mensajes.
Reza por aquellos que perdieron la luz y el brillo de sus almas, debido a sus pecados. Yo estoy aquí para concederos mi amor y mis gracias, y este amor y estas gracias son para todos mis hijos que desean hacer la voluntad del Señor, viviendo su camino de conversión unidos al amor de mi Divino Hijo.
Retornad a vuestras casas con la paz de Dios. A todos os bendigo: en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Hoy, la Virgen Santísima, me hizo comprender que ningún sufrimiento, ninguna cruz debe impedirnos continuar luchando y sacrificándonos por la conversión de las almas, que son tan preciosas y valiosas para Dios. El Señor cuenta con nosotros y mucha veces nos permite experimentar la cruz, para que por medio de ella, sabiéndola soportar con amor y paciencia, haya esperanza y luz para muchas almas ciegas por el demonio, que podrán ver el peligro que corren si continúan siguiendo el camino de tinieblas y de pecado, podrán arrepentirse y volver al camino santo del Señor. Llevar la cruz es permitir que Cristo cure y salve muchas almas con su amor. Llevar la cruz es ayudar a muchas almas a re-erguirse de la vida de pecado para la vida de gracia.

jueves, 22 de marzo de 2018

Peregrinación abril 2018


Peregrinación al 
Santuario de Itapiranga

Fiesta de Pascua

1 y 2 de Abril

Participa en la próxima peregrinación al Santuario de la Reina del Rosario y de la Paz en Itapiranga:



martes, 20 de marzo de 2018



 19 de marzo de 2018 – Itapiranga, Amazonas

Mensaje de María

¡La paz a tu corazón!
Hijo mío, yo, tu Madre, una vez más vengo del cielo con mi Hijo Jesús y San José. Reza, hijo mío, reza y haga que mis hijos recen, porque los tiempos son difíciles.
Muchas almas corren el peligro de perderse eternamente, porque falta oración, falta conversión en la vida de muchos de mis hijos. Sois vosotros los que debéis ser una luz para todos ellos, llevando el amor de nuestros Santísimos Corazones. Hijo, el demonio ganó mucho espacio en muchas familias. Muchos hogares cristianos se vuelven lugares de profanación y de ultrajes a mi Divino Hijo Jesús. Muchas familias están muertas espiritualmente, porque satanás consiguió seducirlas y destruirlas con el pecado.
Rezad muchos Rosarios, haced penitencia por los pecadores, renunciando a la propia voluntad para hacer la voluntad de Dios.
Yo os acojo en mi Inmaculado Corazón y mi Esposo José os acoge en su Corazón Castísimo y, nosotros dos, os colocamos dentro del Sagrado Corazón de mi Hijo Jesús.
Gracias por tu presencia. Yo os acompañaré hasta vuestros hogares con mi Hijo Jesús y San José. Hoy una lluvia de gracias desciende de los cielos sobre vosotros y vuestras familias.
Yo te bendigo hijo mío y a todos tus hermanos: en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

La Santísima Madre vino esta noche acompañada del Niño Jesús, que estaba en los brazos de San José. Durante la aparición, el Niño Jesús me pidió que besase nuevamente el Escapulario de su Padre José. Él me había pedido eso recientemente, cuando me encontraba en Italia, en Vígolo, y ahora una vez más me pidió que lo besase de nuevo en Itapiranga. Jesús me hizo entender cuanto este Escapulario es importante y una señal de protección contra las fuerzas del infierno. Este Escapulario nos hace merecer grandes gracias de su Divino Corazón cuando se lleva con amor y con fe. No rechacemos tantas gracias preciosas, bendiciones y protección que el cielo nos desea dar.
Después, el Niño Jesús, mirando para San José, pidió que él nos bendijese, así como también a toda la humanidad. San José, obedeciendo la orden del Niño Jesús, extendió su brazo derecho, como señal de bendición y protección para toda la humanidad, trazando la señal de la cruz sobre nosotros.




18 de marzo de 2018 – Itapiranga, Amazonas
Mensaje de María

¡La paz a tu corazón!
Hijo mío, yo, tu Madre, vengo una vez más del cielo para invitaros a la oración y a la conversión, porque la oración y la conversión falta en el mundo y en muchas familias.
Di a tus hermanos que no pierdan tiempo. Esta es la hora de escuchar la llamada del Señor, viviendo lo que Él os pide para que muchas almas sean salvadas de la ceguera espiritual. Muchos de mis hijos nada ven y nada oyen y mi Corazón Inmaculado sufre.
Yo estoy feliz con la presencia de cada uno de vosotros, aquí en este lugar, escogido por el Señor y bendecido por mi presencia.
Hijo mío, di a todos que amen a Jesús mucho, mucho, mucho, pues mi Divino Hijo está muy ofendido y los pecados del mundo están atrayendo su Divina Justicia y muchos sufrimientos, porque no hay reparaciones suficientes para aplacar la indignación del Padre Eterno.
Pedid la misericordia de Dios para el mundo pecador. Dios todavía os está dando un tiempo. Aprovechad este tiempo para aprender a ser de Él.
Yo te amo, hijo mío y a todos tus hermanos y os bendigo: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

domingo, 18 de marzo de 2018



17 de marzo de 2018 – Manaus, Amazonas
Mensaje de María
¡La paz a tu corazón!
Hijo mío, yo tu Madre, estoy aquí nuevamente para concederte a ti y a tu familia mi bendición. Yo os coloco dentro de mi Inmaculado Corazón y coloco también a todos aquellos que acogen mis mensajes con amor y los viven verdaderamente como mi Hijos Jesús desea.
Muchos son aquellos que dejaron el camino del Señor por miedo, por vergüenza, por causa de la falta de confianza en mi Hijo Jesús y en mí, tu Madre Inmaculada.
No quedes triste. Dios está separando “las ovejas de los cabritos”1, está separando los suyos, aquellos que no se dejaron debilitar en su fe y no pierden jamás la confianza.
Como mi Hijo Jesús dijo en su Palabra no todo aquél que le diga “Señor, Señor”, entrará en el Reino de los Cielos2.
Di a tus hermanos que aumenten más la fe rezando, ayunando, viviendo en gracia de Dios, acercándose con frecuencia a los Santos Sacramentos. Yo estoy siempre aquí, en este lugar, como también estoy en Itapiranga esperando por cada uno de vosotros para protegeros, para bendeciros y acogeros debajo de mi Manto Inmaculado. Reza, espera y enseña a tus hermanos a rezar, a esperar y a confiar. Dios hará grandes cosas por aquellos que siempre confían y jamás dudan. Yo te bendigo a ti y a toda la humanidad: en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!

1. "«Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria acompañado de todos sus ángeles, entonces se sentará en su trono de gloria. Serán congregadas delante de él todas las naciones, y él separará a los unos de los otros, como el pastor separa las ovejas de los cabritos. Pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda" (Mateo 25, 31-33).
2. "No todo el que me diga: "Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial" (Mateo 7, 21).

viernes, 16 de marzo de 2018


Peregrinación al 
Santuario de Itapiranga

Fiesta de San José

18 y 19 de Marzo

Participa en la próxima peregrinación al Santuario de la Reina del Rosario y de la Paz en Itapiranga:


martes, 6 de marzo de 2018


1 de marzo de 2018 -Italia
Mensaje de María

¡La paz amados hijos míos, la paz!
Hijos míos, yo vuestra Madre, vengo del cielo para pediros que viváis la conversión en vuestras vidas. Esta es la hora en que vosotros debéis vivir una vida unida a Dios, porque tiempos difíciles traerán dolores y sufrimientos al mundo.
Acoged mis mensajes en vuestros corazones, Hace mucho tiempo que yo os hablo, mas mis mensajes muchas veces no son acogidos con amor como mi Hijo Jesús desea.
Yo os hablo, hijos míos, para el bien de vuestras almas. Escuchad las llamadas de mi Corazón. Muchos errores están alejando a mis hijos del camino seguro que lleva hasta el cielo.
Las palabras del Señor no cambian nunca, sus enseñanzas y sus Mandamientos son siempre los mismos. Muchas verdades y muchos dogmas están siendo atacados y considerados sin importancia, porque muchos quieren agradar más a los hombres que a Dios.
Rezad mucho, porque lo que yo dije en mis apariciones del pasado vosotros lo viviréis cada día de forma más intensa. El brazo fuerte del Señor está para abatirse sobre la pobre humanidad. Dejad la vida de pecado para atrás y abrazad la vida en gracia de Dios.
Hijos míos, no cometáis pecados graves, huid del pecado para no caer en el fuego del infierno. El infierno existe y satanás hace todo lo posible para llevar muchas almas a alejarse de Dios renegando su amor divino.
Luchad contra el demonio rezando el Rosario y entregándose siempre en las manos de mi Hijo Jesús. Rezad, rezad, rezad hijos míos. Nuestros Señor me envía al mundo porque desea que todos vosotros reparéis vuestros pecados para poder vivir una vida de santidad, de paz y de amor con todos vuestros hermanos.
Si vosotros no aprendéis a amar, jamás seréis de mi Hijo Jesús. Si vosotros no aprendéis a perdonar, el perdón divino no podréis merecer. Si vosotros no os vaciáis por completo, liberándoos del pecado, no podréis merecer las bendiciones y las gracias del cielo.
Yo os amo y mi amor de Madre os doy. Yo os amo y con mi amor Inmaculado deseo envolveros, guiaros y ayudaros a ser de Dios.
Gracias por haber venido. Gracias por todo aquello que hacéis por mi Hijo Jesús y por mí. Retornad a vuestras casas con la paz de Dios. A todos os bendigo: en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

sábado, 3 de marzo de 2018


28 de febrero de 2018 – Italia
Mensaje de María

¡La paz amados hijos míos, la paz!
Hijos míos, yo vuestra Madre, vengo del cielo para pediros oración, fe y confianza en el Señor, porque Él jamás os abandona y siempre llevará su obra de amor a pleno cumplimiento.
Los hombres pueden crear obstáculos, pueden decir mentiras y hacer cosas a escondidas, mas Dios ve todo y hará que todo salga a la luz de la verdad.
No perjudiquéis a nadie aquí en la tierra con falsedades y con persecuciones, porque un día estaréis delante del Señor y deberéis rendir cuentas por cada palabra y actos hechos.
Rezad para ser buenos y para tener siempre el equilibrio, el discernimiento y la paz, para saber vencer el ataque del espíritu infernal.
Estoy aquí para convidaros a la oración y a la conversión.
Sé que vosotros muchas veces pasáis por grandes dificultades y sufrimientos, mas con mi Hijo Divino, unidos a su amor encontraréis fuerzas para soportar y vencer cada prueba.
Rezad, adorad, haced grandes reparaciones por causa de vuestros pecados y de los pecados del mundo entero. Abro mi manto maternal y os coloco a todos debajo de él para que estéis protegidos contra todo mal. Yo os amo y os concedo las gracias de mi Inmaculado Corazón. Retornad a vuestras casas con la paz de Dios. A todos os bendigo: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

viernes, 2 de marzo de 2018


27 de febrero de 2018 – Italia
Mensaje de María

¡La paz amados hijos míos, la paz!
Hijos míos, yo vuestra Madre Inmaculada, la Reina del Rosario y de la Paz, vengo del cielo para pediros que recéis con fe y con el corazón por el bien del mundo y por la paz.
Hijos míos, Dios os llama a la conversión. Que este tiempo de cuaresma sea de apertura de vuestros corazones a su amor. Arrepentíos de vuestros pecados y vivid una vida nueva unida a Dios.
Que en vuestros hogares la Pasión de mi Hijo sea meditada y recordada y que su cruz sea honrada. Acoged mis palabras maternales en vuestros corazones, amados hijos. Yo os hablo, porque deseo conduciros por el camino seguro que os lleva hasta el cielo.
Muchos de vuestros hermanos no me escuchan, no quieren convertirse y mi Corazón de Madre sufre mucho, porque muchos de estos hijos están caminando por el camino donde se encuentra el demonio que desea devorar sus almas.
Despertad, hijos míos. Despertad para la gracia de Dios. Acoged con amor mis mensajes en vuestras vidas. El mundo está cerca de sufrir un gran y terrible castigo. Yo os digo: un gran dolor llegará sobre el mundo y del cielo vendrá. Convertíos, convertíos, convertíos.
Yo os estoy llamando a Dios ahora, en este momento, para vuestro bien y el bien de vuestras familias. ¡Escuchadme! Rezad el Rosario diariamente y vivid las enseñanzas de mi Hijo Jesús entregándoos cada día a su Sagrado Corazón. Retornad a vuestras casas con la paz de Dios. Os bendigo a todos: en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

jueves, 1 de marzo de 2018


26 de febrero de 2018 – Italia
Mensaje de María

¡La paz esté con vosotros!
Hijos míos, yo vuestra Madre, vengo del cielo para pediros que os decidáis a rezar siempre más, acogiendo con amor y con fe la llamada que el Señor os hace por medio de mí.
Los tiempos son difíciles, hijos míos. Falta la fe y la oración en la vida de muchos de vuestros hermanos, porque muchos no tienen fuerzas para liberarse del pecado.
Llevad el amor de Dios a vuestros hermanos que no saben amar y perdonar. Estad unidos. Vivid en vuestros hogares el amor y el perdón. Si vosotros no aprendéis a perdonar no podréis merecer el reino de los cielos.
Rezad el rosario en vuestras familias, pues por medio de esta oración Dios os concede grandes gracias y aleja muchos males lejos de vuestras familias.
Yo estoy aquí porque os amo y me preocupo de cada uno de vosotros.
Este es el tiempo en que grandes ultrajes son cometidos y permitidos dentro de la casa de Dios y mi Divino Hijo se encuentra muy ofendido.
Los hombres perdieron el sentido de ser fieles a Dios y ya no saben distinguir lo erróneo de lo cierto, la mentira de la verdad. Pedid la luz del Espíritu Santo y Él os guiará por caminos seguros. Solamente Él os puede dar la luz, la fuerza y el coraje para vivir estos tiempos difíciles y tenebrosos donde los demonios del infierno causan grandes daños en las almas. Luchad contra todo mal con la Palabra de Dios, con la confesión, con la Eucaristía, con vuestro amor y obediencia al Señor, porque Él, el Fiel, jamás os abandona.
Rezad mucho, mucho, mucho. Retornad a vuestras casas con la paz de Dios. Os bendigo a todos: en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.  Amén.


25 de febrero de 2018 – Italia
Mensaje de María

En esta tarde, la Santísima Virgen apareció teniendo en sus brazos maternales al Niño Jesús. El Niño Jesús abrió sus brazos como para acogernos en su Sagrado Corazón. Él dijo que pidió para que hagamos amado y conocido su Padre amado José, porque por medio de San José, de su intercesión, Él desea concedernos grandes gracias. Este es el deseo profundo de su Divino Corazón: Ver a San José amado, invocado y honrado.

¡La paz amados hijos míos, la paz!
Hijos míos, yo vuestra Madre Inmaculada, vengo del cielo con mi Hijo Jesús para bendeciros y daros mi amor.
Jesús está aquí, porque os ama y desea vuestra salvación eterna. Mi Hijo Divino siempre se hace presente en este lugar para curar vuestros corazones. Yo estoy siempre con Él, esperando por cada uno de vosotros, para acogeros en mi manto de Madre.
Yo deseo guiaros por el camino de la conversión y de la santidad, por eso, yo os pido: escuchad mis llamamientos de Madre. Yo os digo estos mensajes para el bien de vuestras almas, porque no deseo vuestra infelicidad, mas que seáis felices y que tengáis la paz en vuestros hogares.
Hijos amados, están llegando los tiempos crueles y difíciles. El mundo está patas arriba (o mundo está de pernas pro ar), porque se olvidó de Dios y ya no ama más.
La acción del demonio está cegando a muchos Ministros de Dios y junto con ellos sigue una multitud de almas que se encuentran sin fe y sin esperanza. Ayudad a vuestros hermanos a ser de Dios. Yo quiero proteger a vuestras familias de muchos males. Entregaos a mi protección de Madre. Mi Hijo Jesús me entregó a vosotros como Madre y me entregó el Padre vuestro para que yo os cuide. Consagraos siempre
A mi Inmaculado Corazón, renovando vuestro amor y la promesa de ser siempre de mi Hijo Jesús, fieles a sus enseñanzas y a sus mandamientos.
Yo estoy siempre a vuestro lado y os doy, en este momento, mi bendición maternal, unida a mi Hijo Jesús. Retornad a vuestras casas con la paz de Dios. A todos os bendigo: en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.