6 de septiembre de 2020 – Manaos, Amazonas, Brasil.
Mensaje de la Reina del Rosario y de la Paz
¡La paz amados hijos míos, la paz!
Hijos míos, yo vuestra Madre, no me canso de daros mi
bendición, no me canso de venir del cielo para traeros el amor y la paz de mi
Hijo. Permitid que yo os tome por las manos y os conduzca hasta el Corazón de
mi Hijo. Él os ama y visita en este momento vuestras familias para sellarlas
con su amor, colocándolas dentro de sus llagas santísimas, para que puedan
estar protegidas contra todo ataque del enemigo infernal.
Dios os ama y, hoy, Él está concediendo a cada uno de vosotros
grandes dones y gracias del cielo, para saber soportar estos tiempos difíciles
con coraje. No os desaniméis. No perdáis la fe. Dios está con vosotros y yo
estoy a vuestro lado para ayudaros y para guiaros en todo. A todos os bendigo:
en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!
Antes de irse, la Madre Santísima dijo:
¿Cuándo una aparición es verdadera?
Cuando da testimonio de la verdad, defendiéndola. El Espíritu
Santo no puede estar a favor del error, de la mentira y del pecado, mas Él
confirma y revela a mi Hijo y sus palabras de vida eterna a las almas.