Mensaje de la Virgen María
¡La paz amados hijos míos, la paz!
Hijos míos, yo vuestra Madre vengo del cielo por orden de mi Hijo Divino para bendecir a vuestras familias y para concederos grandes gracias espirituales y corporales.
Tened confianza en el amor de mi Hijo. Su amor es poderoso y santo y cura vuestras almas de muchos males. Rezad para ser de Dios. Rezad para aprender a hacer la voluntad de Dios y a obedecerla.
Muchos no quieren saber de las cosas del cielo y quedan sordos a las llamadas que Dios les hace por medio de mí, mas yo os digo que llegará la hora en que Dios va a actuar y muchos serán aquellos que pedirán perdón y misericordia, mas el tiempo habrá pasado.
Que vuestras familias se vuelvan un lugar santo y bendecido, donde la presencia de Dios es honrada y recordada, por medio de la oración y de la alabanza que le es debida. Muchas familias no se dan cuenta de la presencia Santa de Dios y esto entristece al Señor.
Rezad hijos míos, rezad con amor y con fe, y haced de vuestros hogares una morada santa de Dios, donde Él venga para bendeciros y para enriqueceros con sus gracias.
Haced todo lo posible para que vuestras familias sean de Dios y permanezcan siempre dentro de su Corazón Divino.
Cuidad de vuestros hogares. Las familias que no rezan no pueden tener la luz ni la gracia de Dios. Rezad, rezad, rezad. Volved a vuestras casas con la paz de Dios. A todos os bendigo: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!