22 de
febrero de 2018 - Italia
Oración dada por Jesús
Hoy, Jesús me enseñó esta
oración. Ella vino a mi corazón con un gran deseo de ser totalmente de Él y de
cumplir su voluntad, mismo que mi corazón sea tan pobre y mi voluntad y
acciones todavía imperfectas, mas al escuchar estas palabras vinieron la
confianza, la esperanza de que entregándome y dejándome guiar por él, todo se
tornará posible y santificado por su amor:
Permite también a mí, Señor, estar a tus pies, contrito y
humillado, para llorar mis pecados, para que pueda realmente merecer tu Santo
Amor y perdón. Mi corazón yo te entrego, así como mi alma y voluntad. Hazme
tuyo, ahora y siempre, por toda la eternidad. Que cada segundo, minuto y hora
de mi vida te pertenezcan por completo. Amén.