La primera aparición de la Virgen María, a Maria do Carmo, tuvo lugar el día 2 de mayo de 1994. A Edson Glauber, su hijo, el día 31 de mayo de 1994, mientras él y su madre, rezaban el rosario en casa. Desde entonces la Virgen, San José y Jesús continúan transmitiendo mensajes y oraciones para difundir la devoción en todo el mundo a sus tres Sagrados Corazones.

Los mensajes originales están expuestos en portugués en:

As aparições da Virgem Maria no Amazonas

domingo, 29 de julio de 2018

28 de Julio de 2018



 Manaus, Amazonas

Mensaje de María

La Santísima Madre vino una vez más a transmitir su mensaje celestial. Ella, la Inmaculada, estaba bien delante de mí con todo su amor de Madre. Con su mirada ella nos estaba diciendo. No os preocupéis. No os aflijáis. Yo, que soy vuestra Madre, ¿no estoy aquí delante de vosotros? ¿Por qué os preocupáis tanto? Basta entregar todo al Corazón de mi Hijo y a mi Corazón de Madre con un poquito más de confianza y ¡todo mudará!... Comprendí estas palabras en mi corazón, cuando con su mirada, nos miraba a los ojos. Ella, llena de amor, nos dijo:

¡La paz amados hijo míos, la paz!
Hijos míos, yo vuestra Madre, os amo y dese el bien de cada uno de vosotros, con mi Inmaculado Corazón lleno de amor y de las gracias del cielo.
Escuchad el llamado maternal, porque yo os estoy llamando a Dios y a la conversión, para que sigáis el camino santo del Señor, que lleva hasta el cielo.
No cerréis vuestros corazones cometiendo pecados. Tened fuerza para vencer el pecado y decir siempre “¡hágase tu voluntad en mi vida, Señor!”.
Satanás quiere la guerra, la violencia y la muerte de muchos de mis hijos. Rezad el Rosario con amor y con fe. No permitáis que vuestros corazones se entristezcan y se aflijan. Yo soy la Madre de la alegría y de la verdadera paz, y hoy vengo para alejar para lejos de vuestras familias las emboscadas y los ataques del enemigo infernal, por orden de mi Hijo Jesús. Yo os cubro con mi Manto Inmaculado y os doy una bendición especial.
Rezad, rezad, rezad mucho y Dios siempre os dará la paz. Retornad a vuestras casas con la paz de Dios. Os bendigo a todos: en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.