23 de febrero de 2020 – Manaus, Amazonas, Brasil
Mensaje de la Reina del Rosario y de la Paz
¡La paz amados hijos míos, la paz!
Hijos míos, yo vuestra Madre, os invito a la oración hecha
con amor y fe. Tened confianza en Dios y en su protección divina. No os aflijáis,
el Señor está siempre cerca de todos aquellos que los sirven y lo aman.
Yo estoy aquí para protegeros con mi mando inmaculado.
Rezad por los que no creen y los que no tienen más fe. Éstos si, corren el
peligro de no levantarse más de la vida de pecado y de sufrir las consecuencias
de sus terribles pecados, porque expulsaron a Dios de sus corazones y de sus
vidas.
Interceded, hijos míos, por el bien y la conversión de la
humanidad, que sufre porque no me escucha y no reza.
Acoged mi luz inmaculada y llévenla a vuestros hermanos,
para que ellos sean iluminados por la gracia de Dios y renovad vuestras vidas
en el amor de mi Hijo Jesús.
Hijos míos, el mundo está pasando por grandes pruebas, a
causa de la desobediencia a los Mandamientos Divinos y a los enseñanzas Santas
del Señor.
Dios no ama la desobediencia, Dios no ama corazones
llenos de orgullo. Los orgullosos, si no piden perdón de sus pecados, no
entrarán en el reino de los cielos, porque muchos no quieren admitir sus
errores ni corregirse de ellos.
Volved, volved al Señor y Él hará que la luz de su Faz
Divina brille sobre vosotros y vuestras familias. Yo os amo y con mi Corazón
Inmaculado lleno de paz de Dios os bendigo.
Volved a vuestras casas con la paz de Dios. A todos os
bendigo: en el nombre del Padre, del hijo y del Espíritu Santo. Amén