1 de mayo de
2018 – Amazonas
Hoy, la Santísima Madre, vino
acompañada del Niño Jesús y San José. En esta noche Ella nos transmitió el
siguiente mensaje:
¡La paz amados hijos míos, la paz!
Hijos míos, yo vuestra Madre, vengo del cielo para
deciros que Dios os llama a la conversión y a la oración.
Sed de Dios, hijos míos, para que podáis merecer su paz.
No viváis en el pecado, mas arrepentíos. Pedid perdón a mi Hijo Jesús por
haberLo ofendido con sus infidelidades y frialdad.
Yo estoy aquí, porque deseo que caminéis por el camino
que os lleva hasta el cielo. No os alejéis de mí, vuestra Madre. Dejadme
conduciros a Dios.
Yo os amo y mi amor materno os lo doy. Sed corajosos.
Luchad por el reino de los cielos, porque fue para el cielo que vosotros
fuisteis creados.
Rezad cada vez más, para que el Espíritu Santo os ilumine
y os dé la sabiduría para discernir
donde está el bien y donde está el mal.
Luchad con la oración, con el ayuno, con los sacramentos,
contra todo mal que desea destruir la pureza y la santidad de vuestras almas.
Acoged mi llamada en vuestros corazones y caminaréis por
caminos seguros, donde encontraréis el amor de mi Hijo Jesús.
Rezad por la Santa Iglesia y por los sacerdotes. Ellos
precisan mucho de vuestras oraciones para que seáis fieles a vuestra vocación y
misión. El demonio desea destruir a mis hijos predilectos con el poder, con la
lujuria y con la impureza.
Dedicaos a rezar más por los sacerdotes, para que podáis
consolar el Corazón Divino de mi Hijo Jesús. Yo estoy siempre a vuestro lado y,
esta noche, unida a mi Hijo Jesús y a San José os bendigo: en nombre del Padre,
del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.